Tal vez escuchaste sobre Mongolia o el legendario Genghis Kahn después de ver Marco Polo en Netflix? Si no tienes idea de cómo es este país, entonces, déjame contarte un poquito.
Mongolia es un país democrático ubicado en Asia Central, rodeado de dos grandes monstruos comunistas: China y Rusia. Con tierras llenas de vastas estepas, montañas y desiertos, Mongolia es el país con la menor densidad demográfica en el mundo: aproximadamente 1.95 habitantes por km2. En realidad, hay alrededor de casi 30 animales por habitante (ovejas, vacas, cabras, yaks, camellos, lobos y, por supuesto, caballos), es por ello que la ganadería es una activad económica muy importante para gran parte de la población.
En Mongolia no solo hay mongoles, también existen aproximadamente otros 19 grupos étnicos como los Kazakhs, Tuvan, etc. a lo largo del país. Los mongoles, orgullosos descendientes de Genghis Kahn, el legendario líder de lo que alguna vez fue el imperio más grande del mundo (siglo XIII DC), son famosos por ser probablemente los primeros en domesticar caballos, y se nota! porque son muy hábiles jinetes. Asimismo, los mongoles se caracterizan por su estilo de vida nómade, ya que en cada cambio de estación (principalmente en verano e invierno) se desplazan en busca mejores temperaturas y pastos para su ganado.
Pero, honestamente, para nosotros la característica principal de Mongolia es la hospitalidad de su gente. En cada “ger” (yurtas) como en todas las casas donde llegamos, siempre nos recibían con un té (salado) con leche calientita, una especie de pancitos que ellos mismos hacen, un espacio y frazadas para dormir y una gran sonrisa de bienvenida, y hasta a veces hasta abrían una botella de vodka en tu nombre. Se dice que su estilo de vida nómade es lo que los hace tan hospitalarios, debido a las grandes distancias que deben recorrer es necesario buscar refugio en cualquier ger que encuentren en su camino.
Ulan Bator, la capital:
Siguiendo la tendencia global, la población rural se está moviendo del campo a la ciudad capital, Ulan Bator (UB), alcanzando un número de 1.5 millones de habitantes del total de la población del país: 3 millones de habitantes.
UB es el tipo de ciudad donde convive lo tradicional con lo moderno. Puedes ver un «ger» al lado de un edificio nuevo de 15 pisos; monjes budistas caminando junto a jóvenes hípsters y recontra fashion; y hombres que usan «del» (vestimenta tradicional) mientras conducen su nuevo Toyota Prius.
En nuestro primer día de llegada, fuimos recibidos en UB con la primera nevada de la temporada, refugiándonos en el Museo de Historia Natural. En realidad, esta fue la mejor idea, ya que aprendemos mucho sobre la historia de Mongolia. El museo está bastante bien curado y abarca desde la era paleolítica hasta la política contemporánea, lo que nos proporcionó un marco histórico básico y una mejor comprensión del país.
También visitamos el templo Gandan, unos de los templos budista mas importante del país.
Por fin, fuimos un par de veces al Naran Tuul (el mercado negro), que es una suerte de “cachina” (si eres peruano seguro me entiendes…) donde encuentras de todo, desde calcetines de yak hasta una puerta de ger o los muebles más sofisticados que puedas imaginar. Fiorella se quería comprar todo, pero logramos salir únicamente con una perfecta casaca de plumas, un pantalón y botas de nieve, todo de segunda mano y en perfecto estado. Ahora si, estamos listos para aguantar el frio de Mongolia!
Ana Paula
Que interesante conocer este país! Su cultura, su historia, y disfrutar su hospitalidad. Padrísimo leerlos y vivir un poquito desde su experiencia, gracias por compartir! Y que sigan gozando su viaje y nos cuentan ;))
La llama
Gracias, mi querida Ana Paulita! Tienen que ir a Mongolia alguna vez!