El lago Khovsgol
Después de nuestra parada en la tierra de los renos, nos dirigimos hacia el sur para ir al lago Khovsgol. Pasamos una corta noche en Tsanganuur y un largo día atravesando largas estepas nevadas que hacían muy difícil el tránsito por la ruta.
Manejar una UAZ
Byamba detiene nuestro súper furgón ruso en medio de la nada y dándose vuelta me dice: “ahora te toca a ti” (pero en mongol, así que no entendí ni michi). Me estaba invitando a conducir la Uaz! algo que, honestamente, había deseado en silencio desde que llegamos a Mongolia. Así que sin dudarlo, en una, me apoderé del volante un poco intimidado por la cantidad de nieve, pero más feliz que una lombriz.
Con una caja de cambios caprichosa, una súper dirección asistida y pedales que llegan hasta la rodilla, este animal no es fácil de domar. Encima con los 20 cm de nieve, se hacia súper difícil mantenerte avanzando en línea recta porque tenias que mover el timón demasiado. Después de 15 minutos manejando tengo que admitir mis respetos por pilotos como Byamba pues conducir este vehículo en terrenos extremos y sin quedarse atollado requiere de un verdadero conocimiento y miles de kilómetros de experiencia. Así que mejor le devuelvo el volante a Byamba antes de estropearle el carro. Fiorella tampoco pudo resistirse a probar la manejada pero en 3 minutos casi destruye el auto, así que Byamba tuvo que invitarla a retirarse del volante.
En la noche por fin llegamos al lago Kovsgol considerado el hermano pequeño del famoso lago Baikal, otro lago ubicado un poco más al norte en territorio ruso. Es el segundo lago más grande de Mongolia después del Lago Uvs Nuur, pero es el primero en cuanto a profundidad. Pareciera que estas en el mar, pues no se ve cuando comienza o termina y su color varía en todas las gamas de azul.
En verano el lago tiene bastante turismo nacional pero recupera su tranquilidad al acercarse el invierno, justamente en la época que estamos ahora (octubre). Nuestro ger (yurta) está ubicado a unos metros del lago, así que tenemos una vista de lujo en la zona oeste del lago y a algunos kilómetros de la pequeña ciudad de Khatgal.
Por la noche tuvimos una luna llena que se reflejaba de una manera muy hermosa en el lago y al día siguiente… un impresionante amanecer!
Pasamos toda la mañana en el ger, pues estaba nevando bien fuerte. Recién por la tarde el cielo se abrió y salió el sol así que salimos a dar un paseo por el bosque justo detrás del campamento. Después de una linda caminata entre arboles y hojas congeladas, tenemos que volver porque pronto caerá la noche.
Cabalgar por las estepas
Luego nos mudamos al lado este del lago. Nos quedamos donde una encantadora familia nómade que tiene caballos y que nos llevó a recorrer el lago por la tarde. No había nadie así que teníamos todo el lago para nosotros. Una vez más con unos paisajes alucinantes. Una sensación de libertad total cuando montamos estos caballos medio salvajes a lo largo de los bosques y estepas nevadas. Suena cliché, lo sabemos, pero realmente no nos cansamos de repetir que los paisajes son increíbles.
Después de tan épico paseo con caballos tuvimos una velada excepcional con la familia, con cerveza, vodka y mucha comida (mira abajo como hacer un rico Khuushuur), celebrando nuestro primer mes de viaje.
Definitivamente, el calor humano de los mongoles es todo y hace olvidarnos del frío intenso cada vez que estamos con ellos en el ger.
Nuestra experiencia en el extremo norte termina y lamentamos irnos de estas tierras salvajes pobladas por personas cuya sencillez y generosidad solo se combinan con su hospitalidad …
Una última pausa en el camino de regreso para visitar el monasterio Amarbayasgalant Khiid (trata de pronunciarlo, verás que no es fácil) y volver a la capital durante para pasar nuestros último dias en el suelo de Mongolia antes de embarcarnos en dirección sur y descubrir un nuevo país … CHINA !!!
Bonus track… Manga style !
En resumen
Nos gustó
- Estar a orillas del lago casi sin nadie y con mucha nieve.
- Disfrutar de la tranquilidad invernal.
- Recorrer el borde del lago a caballo.
- La cálida hospitalidad de la familia mongol (una y otra vez)
- Visitar la orilla oriental del lago, que es mucho menos común que la occidental.
Realmente no nos gustó
- El frío durante esta época (octubre), y eso que ni siquiera era invierno (especialmente Fiorella que siempre sufre con el frio).
Informaciones útiles :
Cómo llegar:
- Para llegar a Mörön, puedes tomar un autobús desde UB (aproximadamente 8 h) y buscar un guía local en el sitio (o simplemente un conductor con su Uaz) para llegar a Khatgal.
- Puedes tomar una agencia directamente desde UB y conducir hacia el norte. Esta es una buena opción, pero tenga en cuenta que el viaje es largo, entre 3 y 4 días, dependiendo de las condiciones. Si tienes alguna duda te pasamos los datos de la agencia de Soko, Mongol Nomads, quienes nos ayudaron a organizar nuestro viaje.
Una vez allí:
- Disfruta de la hospitalidad mongol y los hermosos paisajes que rodean el lago Khovsgol.
- Posibilidad de montar a caballo.
- En verano también es posible hacer excursiones en el lago y deportes de agua.
Qué traer:
- En la parte oeste hay varios lodges de todos los precios y muy bonitos. En la parte este es mas básico y recomendamos quedarte con una familia en su ger. En ese caso, debes traer ropa abrigadora y bolsas de dormir, sobre todo si vas a partir de setiembre.
